Para interiorizar la diferencia que hay entre estos dos tipos de alimentos hemos decidido proponernos un reto: nuestra merienda de media mañana tiene que ser natural, sólo podrá complementarse con algo procesado si algunos padres lo consideran oportuno por pensar que quedarían con hambre. Participaremos por filas, haciendo recuento cada día de lo que traemos. Al final de la semana, la fila ganadora obtendrá una medalla.
Ganaron todas las filas porque siempre hubo algún miembro que traía complemento procesado, pero comprobamos que el cubo amarillo apenas tenía restos, el verde tenía más y eso era bueno porque así podríamos hacer compost para alimentar la tierra, que podíamos comer natural, variado y saciarnos. Esta actividad resultó bonita, motivadora y alguno aún sigue trayendo alimentos naturales exclusivamente en su merienda. Nos quedó clara la diferencia.
Para interiorizar la diferencia que hay entre estos dos tipos de alimentos hemos decidido proponernos un reto: nuestra merienda de media mañana tiene que ser natural, sólo podrá complementarse con algo procesado si algunos padres lo consideran oportuno por pensar que quedarían con hambre. Participaremos por filas, haciendo recuento cada día de lo que traemos. Al final de la semana, la fila ganadora obtendrá una medalla.
Ganaron todas las filas porque siempre hubo algún miembro que traía complemento procesado, pero comprobamos que el cubo amarillo apenas tenía restos, el verde tenía más y eso era bueno porque así podríamos hacer compost para alimentar la tierra, que podíamos comer natural, variado y saciarnos. Esta actividad resultó bonita, motivadora y alguno aún sigue trayendo alimentos naturales exclusivamente en su merienda. Nos quedó clara la diferencia.
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